domingo, 17 de septiembre de 2023

MEXICANOS Y DINERO II: TAN LEJOS DE DIOS Y TAN CERCA DE LOS ESTADOS UNIDOS

Por Blanca Padilla 

México declara su independencia de la corona española en 1821, pero prácticamente desde entonces entra en una resbaladiza relación de dependencia con Estados Unidos, su poderoso y agresivo vecino que, en 1848, le arrebatara más de la mitad de su territorio.

Nada se mueve al sur del río Bravo sin que Estados Unidos tenga injerencia a partir de ese momento. Los corruptos gobiernos mexicanos se han plegado siempre a los deseos norteamericanos. En tanto, la clase trabajadora, en su mayoría, dada la idiosincrasia de los mexicanos, ante tanta miseria, sólo se resignan y dan gracias de Dios por tener un trabajo, aunque sea mal pagado. 

Así pues, lo que ha podido hacer o no México, en cuestión de desarrollo económico y social, está condicionado por esta relación de dependencia y por su pasado como colonia ibérica. En este segundo artículo, de esta serie de cuatro sobre México, los mexicanos y el dinero, reseñaremos cómo Estados Unidos fue sustituyendo a Europa como modelo para México y como ese dominio, que ejerce gracias a su poderío económico y militar, ha influido en la situación de pobreza e injusticia social que se vive en México.

Subdesarrollo, ¿etapa previa al desarrollo consecuencia de la colonización y el saqueo?

Históricamente, a partir de la industrialización, un hemisferio del mundo se desarrolló económicamente: el norte. Mientras otro, el sur, ha permanecido en el subdesarrollo. México, en este sentido, está al sur. Los pueblos del norte, provistos de superiores avances tecnológicos, sometieron a los de sur, se repartieron sus territorios, extrajeron sus materias primas y los usaron como esclavos y como mercado cautivo, todo lo cual les sirvió para acumular capital.